A veces, cuando camino por la calle, cuando miro por la ventanilla del autobús, cuando doy vueltas a un café o cuando me pierdo por la ribera del río, me preguntó que es lo que más echo de menos de entonces. De cuándo él estaba.
¿Quieres saberlo?
A parte de todo lo que me gustaba... de hablar con él, de reírme, de reír, de reír, de hablar, de pensar, y de reír otra vez...
¿Qué echó de menos?
¿Lo qué más?
¿Quieres saberlo?
Lo que más echo de menos, es ir al cine. Ya nadie me lleva.
2 comentarios:
Yo te llevo.
Y compramos palomitas porque yo si no me quedo dormida.
Y antes cenamos.
Y en la cola para entrar te doy mal para que te rías.
Y te cuento chistes. Para volver a escucharte reir.
O hablamos de noches que siempre acaban bien.
O contamos el número de Princesas que hay en la ciudad.
(aunque tú y yo sepamos, que realmente sólo hay una, y no soy yo).
Te prometo que pronto te llevo al cine.
T.
eso espero T, eso espero
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