martes, 17 de febrero de 2009

Miedo a tantas cosas

-  Una vez te quise.
-  ¿Y por qué no me lo dijiste?
-  Porque me daba miedo coger el teléfono y llamarte, y me daba miedo mirarte a los ojos y poder perderme en ellos, y me daba miedo echar de menos tus besos, y me daba miedo sentir tu presencia cuando el vacío me acechaba...
-  El miedo no deja vivir.
-  El miedo te paraliza.
-  Intenta correr.  Sal corriendo, ahora, como haces siempre.
-  No.  Ya me he ido hace mucho tiempo.
-  Pero hoy estás aquí.
-  Sí, pero ya no puedo esperar más.  Me da miedo la parte de mí que desconozco.
-  Tal vez si te quedarás fueras mejor.
-  Sería mejor... pero seguiría teniendo miedo.  Miedo a querer.  Miedo a ser mejor.  Miedo a echarte de menos un día, o a echarte de más.  Miedo a sonreír si tú no estás.  Miedo a poner la cafetera para tomarla sola.  Miedo a sentir que puedo vivir sin ti.  Miedo a levantarme un día y darme cuenta de que te echo de menos, pero miedo también a levantarme otro día y darme cuenta de que ya no te quiero y que sigues a mi lado.  Miedo a que no seas feliz conmigo, porque yo no sepa serlo.  Miedo a que yo sea tan pequeña para ti, que no puedas crecer.  Miedo a que pudieras ser feliz con otra persona, y te pierdas entre mis besos y mis caricias. Miedo a que pase el tiempo y nos demos cuenta de que ha pasado sin contar con nosotros.
-  Tienes miedo a vivir.
-  Tengo miedo a vivir, y tengo miedo a querer.

3 comentarios:

Anónimo dijo...

Ismael dice "agárrate de mi mano, que tengo miedo del futuro, y detrás de cada huída estabas tú".

POr muchos miedos que haya, siempre habrá alguien detrás de cada huída ;)

Besos, Princesa!

CHATUN dijo...

siempre detrás de cada huída hay un motivo, y suele tener nombre de persona

Anónimo dijo...

claro, pues eso...que detrás de cada huída, siempre hay un "tú".