miércoles, 3 de diciembre de 2008

Y tú, qué harías?

Cómo mi vida sigue siendo una mezcla de Sexo en Nueva York (según las Madalenas) y Manolito Gafotas (según mi hermana y Tanga), voy a dar alguna explicación para mis devaneos.  Desde que una peluquera me corto el pelo por primera vez, digo yo que con dos años o así, siempre, y digo siempre (menos dos veces: una porque fue gratis y un aquí te pillo, aquí te mato) siempre me ha cortado el pelo la misma persona.  La Cris (y Helena), que saben que me va a quedar bien y mal, aunque yo me empeñé a veces en hacermelo.  Pues al grano... para qué entendáis porque mi cabeza funciona a mil por hora, calcular que influencias he tenido en mi infancia...
Cris, mi peluquera, no juega a la loteria.  No juega.  Pero tiene pensado que hará si un día le toca.  Ahí lo tienes tú.  Ella flotará un autobús y organizará en el Sella una fiesta con orquesta o disco móvil según precio, y con bocata, que menú sale muy caro, para todas las clientas.
Yo ya he contado por aquí cuál era mi sueño si me tocaba.  Pero arreá una mañana que currando un sábado, mandaron un mail que había tocado un premio del euromillón en Zaragoza.  Pues yo me pegué media hora en el curro, convencida de que era yo.  Y no os imagináis lo feliz que fui, después no me entristecí, porque como dice nuestro bar "Cuando peor estemos como ahora..."  Aunque estemos "qué tal, pues mal" la cosa siempre es empeorable.  Y mucho.
Luego le he dicho a mi peluquera y a la clientela que había en el lugar y me tenían por un ser respetable, que la Constitución tendría que recoger que una vez en la vida te tocará un premio bueno.  Sí, me imagino, artículo 122.3 de la C.E. "Todo Español que juegue a la Loteria, Bonoloto, Euromillón, etc, tiene el derecho a ganar un premio (bueno) al menos una vez en la vida..."
Así que los que hablan de reformas, que apunten.  
Y tú, qué harías si te toca?

1 comentario:

Palabra de treintañera dijo...

Lo primerísimo que haría yo sería comprarme dos o tres (mejor cuatro) pares de "Manolos". De puta fina, que dice la Little. Sí señor, medio millón de pesetas en zapatos.