La cruda realidad

Mañana vuelvo a la cruda realidad (no tan cruda porque no está aún la hierbas así que puedo respirar algo) tras mis dos semanas de vacaciones.   Este año estoy molto satisfecha porque me han cundido un montón.  En doce días o así he estado en Munébrega, por supuesto, pero también en Jaraba, en Calatayud, en Sagunto, en Puerto de Sagunto, en Teruel, en el Pirineo: paseando por Jaca, descubriendo el valle de la Garcipollera, Casa Paco, Villanovilla...

En fín, que he vuelto limpia que dice Manolo, y ya he regresado para dejar tranquilo a Kiko Contín que me hacía pérdida en algún harén o algo por el estilo.

Ahora ya sí nos vemos por las ondas...