lunes, 23 de noviembre de 2009

Y si...

¿Qué habría pasado?
Si en Casablanca, ella se hubiera quedado.  O es más, si él se hubiera ido en el avión y ella hubiese contemplado el horizonte.
Si Scarlata O´Hara hubiera caído rendida a la primera en los brazos de Clark Gable.
Si la Bella Durmiente no hubiese sido durmiente, y el príncipe hubiera llegado tarde al baile.
Si Blancanieves no hubiese probado la manzana porque era alérgica.
Si la Bella hubiera despreciado a la Bestia, o mejor, si la Bestia hubiera dejado a la Bella por la Jardinera.
Si Caperucita Roja hubiera hecho por una vez caso a sus amigas y no hubiera caído en las garras del lobo.
Si Amélie no se hubiese empeñado en arriesgarse, en apostar, en buscar al chico de las fotos pérdidas.   O si el chico no hubiese hecho caso a las fotos y se hubiera olvidado de que la conocía en sus sueños.
Si Mary Poppins se hubiera quedado con el hombre orquesta deshollinador en lugar de volar con sus paraguas.
Si en Desayuno con Diamantes, no hubiese habido café.  Ni diamantes.
Si en el Mismo amor la misma lluvia, no hubiera lluvia.  No habría habido besos.
Si en 50 primeras citas, ella nunca se hubiera olvidado de él, él se habría atrevido a conquistarla?
Si en Los Otros él no se hubiera marchado, hubiera entrado la luz en la casa.
Si en La Vida secreta de las palabras ella hubiera sabido nadar, él habría sabido rescatarla?
Si en Fuera de Carta él no hubiera llorado, no se hubiera enamorado, habría aprendido a vivir?
Y si en Titanic el barco no se hubiera hundido, ellos habrían seguido juntos?
Pues me temo que no.
Porque cuando las cosas son fáciles las complicamos, porque cuando nos salimos del guión nadie nos entiende, y porque nos quedamos esperando algo cuando sabemos que no ocurrirá y cuando sabemos que sí, nos marchamos.

1 comentario:

Anónimo dijo...

Cuando sabemos que algo no ocurrirá, esperamos. Cuando sabemos que acabará sucediendo, nos marchamos. Razón no te falta...

Quizá sea porque, conforme pasa el tiempo, nos damos cuenta de que la vida no es como se ve en el cinematógrafo...y porque salirnos del guión da un toque de "emoción" a nuestras vidas, porque si no lo hiciéramos, ya sabríamos lo que va a pasar...

Así que, aunque compliquemos las cosas, tenemos la oportunidad de cambiarlas. Cambiar nuestro guión. ¡Cuánto poderío!

;)

Un beso, Princesa.

T.