martes, 1 de diciembre de 2009

Bye.

Se evaporó.
Se marchó.
La sensación de pertenecerte.
De buscarte.
Se quedaron atrás los besos escondidos
Los abrazos que llenaban el vacío
No estás.
Adiós.
Te ayudé a lamer mis heridas
Te guié hasta mi final
Subraye en negrita mis errores
Y supiste donde golpearme
Y los días pasaron
Se marcharon sin hacer ruido
Lo que empezó, terminó
Te llevaste sueños que nunca habían existido
Y me quede muda, sin palabras
Sin susurros, sin sonidos, sin luces
Un día clareo, y no quise mirar
y al levantar la mirada
comprobé que no había heridas
que te habías marchado
y que yo sonreía
y supe que lo había logrado
Hay que llamar a las cosas por su nombre
Me equivoqué contigo
perdí el tiempo
y ahora sólo sé
que ojalá algún día, te pueda ir bonito.

No hay comentarios: